Fondos de la Unión Europea

 

Más de la mitad de los fondos de la UE se canaliza a través de los cinco Fondos Estructurales y de Inversión Europeos (Fondos EIE), gestionados conjuntamente por la Comisión Europea y los países de la UE. Todos esos fondos se destinan a invertir en la creación de empleo y en una economía y un medio ambiente europeos sostenibles y sanos.

Los Fondos EIE se concentran principalmente en cinco sectores: Investigación e innovación, tecnologías digitales, economía hipocarbónica, gestión sostenible de los recursos naturales y pequeñas empresas.

Tanto los Fondos Estructurales como el Fondo de Cohesión atienden a la finalidad de favorecer un mayor grado de cohesión económica y social en el espacio comunitario, a través de la cofinanciación de las políticas de gasto público desarrolladas por los estados-miembros y dirigidas a la consecución de dicho objetivo.

Los Fondos Estructurales y de Inversión Europeos son:

  • Fondo Europeo de Desarrollo Regional (FEDER): fomenta el desarrollo equilibrado en las distintas regiones de la UE.
  • Fondo Social Europeo (FSE): apoya proyectos relacionados con el empleo en toda Europa e invierte en el capital humano europeo (trabajadores/as, jóvenes y demandantes de empleo).
  • Fondo de Cohesión (FC): financia proyectos de transporte y medio ambiente en países cuya renta nacional bruta (RNB) per cápita sea menor que el 90% de la media de la UE. En 2014-2020, estos países son Bulgaria, Chequia, Chipre, Croacia, Eslovaquia, Eslovenia, Estonia, Grecia, Hungría, Letonia, Lituania, Malta, Polonia, Portugal y Rumanía.
  • Fondo Europeo Agrícola de Desarrollo Rural (FEADER): se centra en la resolución de problemas específicos de las zonas rurales de la UE.
  • Fondo Europeo Marítimo y de Pesca (FEMP): ayuda a los pescadores a practicar una pesca sostenible y a las comunidades costeras a diversificar sus economías, mejorando la calidad de vida en las zonas litorales europeas.

Además, en julio de 2020, el Consejo Europeo acordó un instrumento financiero excepcional de recuperación temporal conocido como Next Generation EU (Próxima Generación UE) dotado con 750.000 millones de euros para el conjunto de los Estados Miembros. El Fondo de Recuperación garantiza una respuesta europea coordinada para hacer frente a las consecuencias económicas y sociales de la pandemia de COVID y transitar hacia una Europa climáticamente neutra (sin emisiones netas de gases de efecto invernadero). Su principal componente es el Mecanismo de Recuperación y Resiliencia, con una duración de seis años, de 2021 a 2026, y con un importe total que asciende a 672.500 millones de euros (312.500 en transferencias y 360.000 millones en préstamos a bajo interés).

Este Fondo de Recuperación, de duración limitada y financiado con recursos adicionales a los previstos para financiar el Marco Financiero plurianual 2021-2027, se integrará en los presupuestos anuales de la UE, en el que también se incluyen los tradicionales fondos de la política de cohesión. Por tanto, son recursos diferentes. No obstante, pueden financiar proyectos de inversión y reformas donde se complementen con otros fondos o programas de la UE, asegurando no incurrir en doble financiación.

Para poder acceder a los fondos del Mecanismo de Recuperación y Resiliencia, los Estados miembros han aprobado planes nacionales de recuperación y resiliencia. En España, el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia contempla una sólida agenda de inversiones y reformas estructurales para hacer frente la crisis a través de un despliegue efectivo de hasta 140.000 millones de euros, de los que 70.000 millones corresponden a transferencias no reembolsables. El resto serán préstamos. El Plan es un gran proyecto de país en el que están implicados todos los niveles de la Administración: estatal, autonómico y local, además del sector privado. El objetivo es transformar nuestra economía para hacerla más verde, digital, inclusiva y cohesionada e incrementando, al mismo tiempo, su capacidad de crecimiento a medio y largo plazo.

Por otro lado, el Fondo REACT-EU está dotado con 50.600 millones de euros y su objetivo es ampliar y dar continuidad a las medidas de respuesta y reparación de la crisis, puestas en marcha desde el inicio de la pandemia. Los fondos de REACT-EU operan como fondos estructurales (FEDER), pero con mayor flexibilidad y agilidad en su ejecución. REACT-EU promoverá la recuperación ecológica, digital y resiliente de la economía. España recibirá algo más de 12.400 millones de euros para su ejecución que, en su mayor parte, ya han sido asignados a las Comunidades Autónomas, principales encargadas de su ejecución.

Entre las principales actuaciones objeto de estos fondos, destacan aquellas destinadas a la transición hacia una EUROPA más verde, climáticamente neutra, favoreciendo la transición a una economía con bajo o nulo consumo de energías fósiles.

 

ASIGNACIÓN PARA ESPAÑA

 


 

 

La Universidad Pablo de Olavide es beneficiaria de ayudas procedentes de Europa a través de varios mecanismos, como el Fondo Europeo de Desarrollo Regional (FEDER), el Mecanismo de Recuperación Transformación y Resiliencia o los Fondos REAC.