TARTA DE CHOCOLATE Y AVELLANAS

¡Hola a todos! Hoy os traigo una receta muy sencilla de hacer, aunque teniendo en cuenta el resultado final cualquiera diría que es una receta mucho más elaborada. Se trata de una tarta que no requiere de horno y, además, no contiene ni lácteos ni harinas ni huevo por lo que es una magnífica opción para veganos/vegetarianos, intolerantes a la lactosa y celíacos. Por otro lado, el sabor a chocolate y avellana es tan intenso que puede recordar al sabor de la nocilla o nutella, aunque esta tarta no lleve ningún tipo de azúcar añadido ni edulcorantes. En definitiva, ¡una tarta deliciosa para los amantes del chocolate!

INGREDIENTES

• Una bolsa de avellanas de 200g
• Dos cucharadas soperas sin colmo de cacao 100% desgrasado en polvo
• Una caja de dátiles de 200g
• Dos cucharadas soperas y una cucharada de postre de aceite de coco
• 350 ml de bebida de almendras
• Dos cucharadas soperas sin colmo de crema de cacahuetes.
• Dos tabletas (400g) de chocolate negro para fundir.
• Puñado de nueces (30g)

ELABORACIÓN

Para la base:

1. Deshuesar los dátiles haciendo un corte transversal, y trocearlos.

2. Verter en el vaso batidor las avellanas, el cacao en polvo, las dos cucharadas soperas de aceite de coco y la mitad de los dátiles troceados.

3. Batir durante un buen rato todos los ingredientes hasta que quede una mezcla homogénea y granulosa. Es posible que sea necesario ir parando y moviendo la mezcla cada poco tiempo….¡Toca tener un poco de paciencia!

4. Verter la mezcla en el molde, extenderla por toda la base y aplastarla dando pequeños golpes con una cuchara sopera.

5. Introducir el molde en el frigorífico mientras se prepara el relleno.

Para el relleno:

1. Trocear las tabletas de chocolate e introducir las onzas en un tarro o tupper de cristal junto a la cucharada de postre de aceite de coco.
2. Llenar una olla con agua hasta la mitad, introducir el tupper con el chocolate, y poner a calentar para así fundir el chocolate al baño maría.

3. Una vez fundido, verter en el vaso batidor junto a la bebida de almendras, la crema de cacahuetes y la otra mitad de los dátiles troceados.

4. Batir durante unos segundos y una vez homogeneizado verter en el molde, sobre la base.

5. Trocear las nueces y añadirlas por encima de la tarta. Las nueces pueden sustituirse por cualquier otro fruto seco, alguna fruta o chips de chocolate.

6. Dejar enfriar durante unas 6 horas aproximadamente para que la tarta cuaje, ¡y a disfrutar de esta fácil, rápida y rica tarta!

OBSERVACIONES SOBRE EL RESULTADO

Para poder realizar una buena valoración del resultado final, formulé y pasé una encuesta a 4 personas que consumieron la tarta para que pudieran darme su opinión acerca de su sabor, su textura, y otros aspectos. Por un lado, la mayoría de los comensales pensaron que en base al resultado la tarta no era fácil y rápida de hacer, aunque ya podemos ver que sí lo es. Además, cabe destacar que a todos los encuestados les ha gustado la textura de la tarta y todos ellos querrían volver a comerla. Por otro lado, sólo a la mitad le recordaba al sabor de la nocilla o nutella, pero en las observaciones finales también un encuestado indicó que le recordaba al sabor de los bombones Ferrero Rocher. También cabe mencionar que a la mayoría de los comensales les gustó tanto el sabor de la tarta que incluso pensaron que llevaba azúcar a pesar de que no era así. En función de la textura, la mayoría de los que consumieron la tarta adivinaron que no llevaba harina, pero la mayoría creyó que llevaba leche por su textura cremosa. Por último, es importante destacar que un encuestado indicó que le gustaría que la base de la tarta tuviera más grosor, y otro comensal también dijo que le gustaría que el sabor fuera más dulce.

En definitiva, ¡la tarta gustó mucho por su textura y su sabor intenso a chocolate!