Pan de trigo sarraceno🍞

Vamos a preparar un pan integral que además es fermentado, pero no te asustes, adelanto que ¡no hay que amasarlo! Este pan es una muy buena opción para las personas que no pueden consumir el gluten, ya que resulta imposible encontrar un pan integral y que sea de buena calidad en los supermercados. Así que, ¡vamos allá!

Nota: puede cambiarse el tipo de fruto seco, además si queremos que sea apto para bebés se deben triturar los frutos secos que queramos utilizar previamente.

Tiempo necesario: 8h de remojo, 24h de fermentación, 10 min hacer la masa y 45-50 min de horneado.

Dificultad: media.

Preparación:

1. Enjuagamos el trigo sarraceno para quitarle cualquier impureza.

2. Lo dejamos en remojo durante 8h.

3. Quitamos el agua de remojo pero no enjuagamos ya que la textura pegajosa que se queda nos ayudará a formar la masa.

4. Echamos todos los ingredientes en un bol, y con ayuda de una batidora de mano los procesamos. En este paso es importante que la mezcla quede homogénea pero siga siendo rugosa.

5. Vertemos la mezcla en un recipiente grande, lo tapamos con un paño limpio y lo dejamos fermentar en un lugar cálido durante 24h. Una vez pasadas las 24h, el pan habrá fermentado y duplicado su tamaño.

6. Mientras precalentamos el horno (a 200ºC), cogemos un recipiente apto para horno (en mi caso es para pan tipo molde), le ponemos papel de horno y vertemos la masa homogéneamente por todo el recipiente.

7. Horneamos durante 45-50 minutos mientras vigilamos de vez en cuando. Sacamos del horno, dejamos enfriar y cortamos a rebanadas.

Tips y consejos:

Cuando enjuagues los granos de trigo sarraceno te animo a poner debajo un recipiente hondo para no desperdiciar el agua, ¡luego la puedes usar para regar las plantas!

Podemos congelar el pan, así lo tendremos para toda la semana.

Puedes añadir el tipo de fruto seco que quieras, pero debes echar la misma cantidad que en la receta (1/2 taza).

Curiosidades sobre el trigo sarraceno:

Podemos pensar que este grano se parece al trigo, pero lo cierto es que no pertenecen a la misma familia.

El trigo sarraceno es un pseudocereal, en cambio al trigo tradicional se le conoce como un cereal.

Además, el trigo sarraceno no contiene gluten a diferencia del trigo tradicional, lo cual es un punto muy relevante para las personas que no pueden consumirlo.

Este grano es rico en hidratos de carbono, energético y saciante. Aporta aproximadamente unas 350 kcal cada 100 g, muy pocas grasas y con un reducido contenido de azúcares, destacando su aporte de fibra y también de proteínas vegetales, con unos 9-10 g cada 100.

Referencias: blog DAP, 7 de diciembre 2022, «Trigo sarraceno o alforfón, cereal de nombre confuso que no tiene gluten».

Análisis del resultado:

Este pan tiene un sabor característico del trigo sarraceno, es cierto que sin tostar tenía una textura más rugosa, por ello recomiendo que se tueste antes de consumirlo, así estará más crujiente.

Cata y análisis:

Para la cata tosté las rebanadas previamente y les eché AOVE. Las probaron 3 personas.

Hice preguntas relacionadas con el sabor y la textura, si volverían a consumirlo y qué puntuación le darían:

Dos de ellas coincidían en que aportaba mucho sabor en comparación con otros panes que suelen comer y que casi no se notaba el sabor del aceite, y que en cuanto a textura no estaba totalmente crujiente y que era bastante denso. De estas dos personas sólo una le daría otra oportunidad. La puntuación fue de 3 puntos (sobre 5) y de 2.

Por último, le di a probar el pan a otra persona, en este caso tuvo un resultado positivo pues le gustó mucho y mencionó que la textura final le agradaba, y además del AOVE le añadió tomate triturado. Me dijo que lo volvería a probar sin dudarlo. La puntuación que dio fue de 4 puntos sobre 5.

En conclusión, si no te importa que la textura no quede totalmente crujiente y algo densa deberías probarlo, además si quieres innovar y hacer un pan que contenga hidratos de carbono y proteínas de alta calidad te animaría a que lo hicieras, ¡vale la pena!