Tortillitas de gambas de cristal
Introducción:
Las tortillitas de camarones es una receta tradicional de la comida española y muy popular en la región de Sanlúcar de Barrameda. En este caso, hemos usado gambas de cristal que son una especie de gamba que se captura desde hace pocos años cuando descubrieron que no se trataba de crías de la gamba blanca, sino de una especie concreta que mantenía ese tamaño y color característico. Hemos elegido este crustáceo para darle un toque innovador a una receta de hace más de 500 años.
Ingredientes:
- 100 g de harina de trigo
- 75g de harina de garbanzo
- 1 vaso de gambas de cristal
- 1 cebollita nueva
- 1 mata de perejil fresco
- Agua muy fría
- Aceite de oliva virgen extra
Utensilios:
- Sartén para freir
- Espátula
- Cuchillo
- Tabla
Elaboración:
- Picamos la cebolla y el perejil muy fino
- En un bol mezclamos la harina y el agua muy fría hasta obtener una masa homogénea y más bien líquida.
- Incorporamos la cebolla, el perejil, las gambas y una cucharadita de sal.
- Ponemos a calentar el aceite de oliva en una sartén honda. Cuando esté bien caliente (unos 180º) se añade pequeñas porciones de masa. Con ayuda de la cuchara se va estirando la masa para que quede más fina.
- Dar vuelta y vuelta y sacar cuando estén doraditas. Colocar en un plato con papel absorbente para quitar el exceso de aceite de las mismas y emplatar.
Consejos:
- En cuanto a la sartén, es importante que sea honda para que las tortillitas puedan flotar al hacerse y no tropiecen unas con otras.
- Es recomendable añadir el agua poco a poco para conseguir la masa homogénea y el espesor deseado.
- Fuera de lo tradicional y cada vez más utilizado es la sustitución del agua fría por agua con gas para conseguir unos bordes crujientes y con esa curiosa terminación de “encajes”.
Tiempo y dificultad:
El tiempo de elaboración de esta receta es de unos 20-30 min y la dificultad es baja aunque es normal al igual que otras recetas que la primera vez no salga del todo bien.
Análisis del resultado:
Tras probar el resultado vemos que la masa ha quedado menos fina y por tanto menos crujiente de lo esperado. Esto se debe a la falta de agua de la masa. Sin embargo, las gambas de cristal aporta el crujiente y su sabor dulce característico. Es una receta sabrosa que todo el mundo acaba repitiendo.