Enchiladas mexicanas

Esta receta trata sobre unas enchiladas mexicanas, una opción diferente a los clásicos burritos y tacos, y en mi opinión mejorados. La base de esta receta es sobre todo la salsa roja, la cual embadurnará las fajitas rellenas de pollo y decoradas con nata agria casera y queso feta (sustituyendo al queso mexicano).
Para realizarla, siendo 5 raciones, necesitaremos:
-Para las fajitas:
- 10 tortillas de trigo
- 3 pechugas de pollo enteras
- 60 gramos de un queso que funda bien (emmental, mozzarella, gouda…)
- 60 gramos de queso feta
-Para la nata agria:
- 1 bote de nata fresca (las de nevera, 200g)
- 30mL de limón
- 1 pizca de sal
-Para la salsa roja:
- 2 chiles anchos deshidratados
- 2 chiles guajillo deshidratados
- 1 tomate mediano
- 1 cebolla mediano
- 2 dientes de ajo
- 1 cucharada de café de orégano
- Agua
Los pasos para realizarla son:
- En primer lugar, prepararemos la nata agria que se beneficia de unas horas en nevera, mantenla ahí todo lo posible o realízala con antelación. Esta es muy sencilla, mezcla el bote de nata fresca con el zumo de limón y sal, a continuación déjala reposar media hora fuera de la nevera, remueve e introdúcela en la nevera hasta servir.
- Por otro lado, para realizar la salsa, tatemaremos el tomate y cebolla, este proceso busca quemar la superficie externa de las hortalizas con objeto de aportarle esos matices de sabor y que la piel los cocine por dentro. Para ello pondremos una sartén u olla a fuego fuerte sin aceite, cortamos la cebolla a la mitad, y ponemos las dos hortalizas en la sartén, quemando todas sus partes posible sin carbonizar. Con esto realizado, añadiremos a una olla todos los ingredientes de la salsa, con el agua que cubra uno o dos dedos más que todos los ingredientes. Cuando hierva, añadiremos las pechugas para que se cuezan en esa propio agua, aportando sabor a la salsa y adquiriendo el sabor de esta. A los 20 minutos aproximadamente las sacamos y dejamos enfriar. Cuando el agua de la salsa reduzca considerablemente dejando ver las hortalizas, la trituraremos, y si queda muy líquida podemos reducirla. Cabe recalcar que se busca una salsa líquida que mantenga un poco de consistencia.
- Con el pollo ya frío, lo deshilacharemos con las manos e introducimos en la tortilla con un poco del queso para fundir, formando las fajitas.
- A continuación, con el horno previamente precalentado a 180 grados con calor arriba y abajo, en una bandeja extenderemos salsa en la base para fijar las fajitas, colocamos estas y encima una cantidad generosa de la salsa roja.
- Cuando se haya horneado la salsa, que se haya quedado algo sólida añadimos el queso feta y la nata agria, lo horneamos unos 2 minutos y retiramos.
- Ya están listas las fajitas para ser disfrutadas
Esta receta fue muy bien recibida por las personas que las probaron, posee el picante justo y las notas frutales de los chiles, además del contraste con el queso feta y nata agria, el cual lo eleva a una receta sobresaliente. Algunos tips son el de cocer el pollo en la olla de la salsa, para que adquiera ese sabor y la salsa los jugos del pollo, otro tip sería reducir la salsa si es demasiado líquida y no temer a los chiles por su posible picante.