Patatas guisadas con carne

Ingredientes (para 2-3 personas)

• 6 baby zanahorias
• 2 cebollas
• 3 patatas pequeñas
• 2 pimientos rojos
• 1 calabacín
• 2 alcachofas
• Perejil fresco al gusto
• Carne de cerdo con hueso (300-400 g)
• 1 pastilla de doble caldo Starlux
• 1 chorro de vino blanco
• Aceite de oliva virgen extra
• Sal (al gusto)

Elaboración paso a paso:

1. Lava y pela todas las verduras. Corta:

• La cebolla, los pimientos y el calabacín en trozos medianos.
• Las zanahorias en rodajas.
• Las patatas, en cachelos o trozos irregulares (para que suelten almidón).
• Las alcachofas en cuartos.

2. En una sartén con un poco de aceite de oliva, sofríe la cebolla, los pimientos, el calabacín y las zanahorias hasta que estén tiernos y ligeramente dorados. Luego, tritúralos o pásalos por un pasapurés junto al perejil con un poco de agua o caldo hasta obtener una salsa espesa. Las alcachofas no se sofríen.

3. En una olla aparte con un poco de aceite, dora la carne de cerdo con hueso. Una vez sellada, añade las alcachofas y rehoga todo junto unos minutos.
   
4. Añade la salsa de verduras a la olla con la carne y las alcachofas. Remueve bien para integrar sabores.
   
5. Añadimos los líquidos y condimentos a la olla. Incorpora también las patatas troceadas.

• Echa un chorrito de vino blanco y deja que evapore el alcohol (2-3 minutos a fuego medio).
• Cubre con agua hasta que los ingredientes queden bien sumergidos.
• Agrega la pastilla de caldo y un poco de sal al gusto.

6. Tapa la olla y deja cocinar a fuego medio-bajo durante unos 30-40 minutos, o hasta que las patatas y la carne estén bien tiernas.
   

Puntos críticos:

• Corte de las verduras: Si los cortes no son del mismo tamaño, algunas partes se cocinarán antes que otras, afectando la textura del plato.
  
• Dorado de la carne: Si no se dora bien al principio, la carne puede perder sabor y resultar menos apetecible.
  
• Uso de alcachofas: Si no se limpian o manipulan bien, pueden oscurecerse o aportar un sabor amargo al guiso.
  
• Evaporación del vino blanco: Si no se cocina el tiempo suficiente, puede quedar un regusto a alcohol que estropea el conjunto.
  
• Cantidad de agua y cocción final: Si se añade demasiada agua, el guiso puede quedar insípido; si se añade poca, puede pegarse o quedarse seco.

Valoración de los comensales:

Comensal 1: «Me ha encantado, la carne estaba muy tierna y jugosa, y la salsa de verduras le daba un sabor casero increíble. Me lo comería otra vez sin pensarlo.»

Comensal 2: «Muy rico y reconfortante, me ha recordado a los guisos de mi abuela. Se apreciaban las verduras que estaban en su punto y el sabor del vino le daba un toque especial.»

Conclusiones:

El resultado ha sido muy satisfactorio. El guiso queda sabroso y reconfortante, con una textura muy agradable gracias a la combinación de la carne tierna, las patatas melosas y las verduras bien integradas en la salsa. El toque del vino blanco y el perejil le da un aroma especial que realza el conjunto. Me ha sorprendido lo bien que se mantienen las alcachofas sin perder su forma ni sabor. La próxima vez probaré a añadir alguna especia más, como laurel o pimentón, para intensificar el sabor. Sin duda, es una receta casera que repetiré, ideal para comidas en familia.