Fajitas mixtas

Las fajitas es uno de los platos fundamentales de la gastronomía mexicana y se han diversificado últimamente por todo el mundo. Las fajitas son muy fáciles de cocinar, están llenas de color y de sabor y pueden usarse como alternativa rápida tanto en cenas como almuerzos. Este plato consta de dos tipos de fajitas con diferente sabor y texturas con el fin de mejorar la experiencia sensorial y gastronómica.
Ingredientes:
- 500 gr de carne picada mixta/de ternera/de cerdo
- 1 pimiento rojo
- 1/2 tomate
- 1 cebolla
- Tortillas de trigo (4)
- 1 aguacate
- 100 gr de tomate frito
- Sal
- Aceite de oliva
- Pimentón
- Comino
- Pimienta
- Medio limón
- Una cucharada de postre de azúcar
Utensilios:
- Sartén
- Bowl
- Espátula
- Cuchillo
- Tenedor
Elaboración:
1- En primer lugar, cortaremos la mitad de las verduras (tomate, pimiento y cebolla) en tiras pequeñas y finas con el objetivo de que se cocinen rápidamente. Calentaremos la sartén añadiendo aceite de oliva y cuando esté bastante caliente añadimos los vegetales troceados. Salteamos las verduras y cuando estas comiencen a dorarse las alejamos del fuego y las dejamos reposar.
2- Cocinaremos la carne en otra sartén con aceite de oliva sin remover demasiado, especiamos y esperamos hasta que esté hecha por los dos lados. Cuando comprobemos que la carne está hecha tanto dentro como fuera, retiramos la mitad de esta carne en un plato y añadiremos las verduras y la salsa a la otra mitad de carne en la sartén. Dejamos que se frían unos minutos hasta que se forme una masa consistente y retiramos del fuego dejando reposar el relleno de las primeras fajitas.
3- A continuación, prepararemos el guacamole casero y cortaremos la otra mitad de las verduras. Quitaremos el hueso al aguacate y añadiremos todo su contenido a un bowl, junto con una cucharada de azúcar, sal, aceite de oliva y medio limón. Amasamos con un tenedor hasta conseguir una textura cremosa.
4- Por último, prepararemos 2 fajitas (calentadas previamente en el microondas) junto al relleno con la salsa y otras 2 con el guacamole, la ternera sin salsa y las verduras sin cocinar. Cerraremos las fajitas y en una satén le daremos vuelta y vuelta para que se dore y adquiera una textura más crujiente. En este caso añadimos un poco de queso por encima para que se fundiese un poco. Ya solo quedaría emplatar y servir.
Consejos:
- En este caso utilizamos tomate frito y nos dió un buen resultado. Si embargo, también puede elegirse algún tipo de salsa mexicana más picante. Siempre está la opción de elaborar tu propia salsa y mejorar aún más la experiencia gastronómica y nutricional.
- Hay que tener cuidado con el tiempo que dejemos el sofrito haciéndose, ya que si nos pasamos la carne podría quedar reseca.
- Es muy importante tener el aceite bien caliente antes de añadir los ingredientes.
- Es importante elegir un queso destinado para fundir si queremos añadirlo por encima de la fajita, ya que sino no se fundirá y no aportará la misma textura.
- En caso de que no te guste la textura de las verduras crudas, también puedes cocinar tus verduras con un poco de aceite de oliva para el segundo relleno.
Tiempo y dificultad:
Esta receta conlleva un tiempo aproximado de media hora, siendo una receta sencilla, rápida y muy flexible según las preferencias de los comensales. La dificultad es baja al conllevar prácticas culinarias básicas, utensilios, preparaciones y conocimiento de cocina bajos.
Análisis del resultado:
Tras presentar la receta y que los comensales la probasen, he sacado varias conclusiones. Por una parte, el formato de la primera fajita fue mucho más atractivo y sabroso así que sin duda fue la favorita. Esto ya que las verduras crudas no le gustaron tanto en el relleno con guacamole y carne picada, por lo que la próxima vez las cocinaré. Por la otra parte, creo que debería haber buscado otra textura y sabor que contrarrestase con el guacamole como podría ser algún tipo de crema agria. Sin embargo, la receta fue todo un éxito y quisieron repetir.