Bruma Atlántica

Pulpo a la gallega sobre cama de patatas cocidas, al estilo tradicional.
Cuando piensas en sabores que evocan el mar, la brisa fresca del Atlántico y la tradición de la cocina del norte de España, el pulpo a la gallega es uno de esos platos que hablan por sí solos. Esta receta sencilla y humilde, originaria de Galicia, convierte ingredientes básicos en una auténtica delicia. Ideal para compartir como tapa o servir como plato principal, este clásico se disfruta mejor con una base de patatas cocidas que absorben todo el sabor del pulpo y el pimentón.
Ingredientes (para 2-3 personas):
- 1 pulpo entero de aproximadamente 1,5 kg (fresco o congelado previamente)
- Agua
- 1 hoja de laurel
- Sal gruesa
- 3 patatas medianas
- Pimentón dulce (o mezcla de dulce y picante, al gusto)
Procedimiento:
- Preparar el pulpo:
- Si el pulpo es fresco, congélalo previamente al menos 24 horas para romper las fibras. Luego descongélalo completamente antes de cocinar.
- Pon a hervir abundante agua en una olla grande con la hoja de laurel y un poco de sal.
- «Asustar al pulpo»: cuando el agua esté hirviendo, sujeta el pulpo por la cabeza y sumérgelo en el agua durante 3 segundos. Sácalo y repite este proceso 3 veces. Esto ayuda a que la piel no se desprenda.
- Luego, deja el pulpo completamente sumergido, baja un poco el fuego y cocina entre 35 y 45 minutos, dependiendo del tamaño.
- Para comprobar el punto, pincha con un palillo en la parte más gruesa de los tentáculos: debe entrar con suavidad.
- Apaga el fuego y deja reposar el pulpo en el agua caliente 5 minutos antes de sacarlo.
- Cocer las patatas:
- Mientras se cuece el pulpo, pela y corta las patatas en rodajas gruesas.
- Cuécelas en agua con sal durante 20–25 minutos, hasta que estén tiernas pero firmes. Escurre y reserva.
- Montar el plato:
- Corta los tentáculos del pulpo en rodajas de aproximadamente 1 cm de grosor.
- En un plato, coloca una base de rodajas de patata.
- Encima, distribuye el pulpo uniformemente.
- Espolvorea con sal gruesa, pimentón (puedes mezclar dulce y picante) y un generoso chorro de aceite de oliva virgen extra.
Comentarios comensales:
«El pulpo, súper tierno y muy sabroso.»
«Las patatas con el pimentón y el aceite estaban brutales, añadiría más del pimentón picante»
«Plato simple, pero lleno de sabor. Lo repetiría sin dudar.»
«Perfecto para picar con amigos y una copa de vino.»
Valoración final:
No es un plato complejo, pero ahí está su grandeza: en hacer de lo simple algo memorable. Un 10 rotundo si se acompaña con un buen albariño bien frío. Tradición, mar y autenticidad en un mismo plato.