CONVOCATORIAS ABIERTAS PARA LOS PRÓXIMOS NÚMEROS
Trabajo sexual: politizar los espacios, momentos y subjetividades a través de narrativas
Editoras: Pilar Albertín (Universidad de Girona), Estefanía Acién (Universidad de Almería) y José López Riopedre (UNED)
Recepción de artículos: hasta el 15 de septiembre de 2025
La movilidad humana desde las dimensiones sexo/género: estudios de caso y debates teórico-metodológicos
Editores: Enrique Coraza de los Santos. El Colegio de la Frontera Sur (México), Pilar Uriarte Bálsamo. Universidad de la República (Uruguay)
Recepción de artículos: 30 octubre del 2025
Cada número contará con dos secciones una de carácter general para artículos que no encajen en las líneas propuestas y una sección específica con relación a la temática propuesta.
Trabajo sexual: politizar los espacios, momentos y subjetividades a
través de narrativas
Pilar Albertín (Universitat de Girona, España); Estefanía Acien (Universidad de Almería,
España) y Jose López-Riopedre (UNED Lugo, España).
En este monográfico intentaremos recoger aquellos aspectos de la práctica laboral del
trabajo sexual (TS), las experiencias de las mujeres y también de hombres implicados,
así como de otras personas que median en esta actividad. Así mismo, los discursos
entorno al TS y metodologías y epistemologías para conocer, reflexionar y cuestionar
formas hegemónicas de pensamiento y acción que se imponen en el imaginario social.
Pretendemos abrir un espacio principalmente a trabajos realizados que permiten el
avance en derechos y en el bienestar social y psicológico de las mujeres cis y trans.
Considerando diferentes temáticas: jurídicas, antropológicas, psicológicas, educativas,
medios información, etc...
El TS es una actividad basada en la oferta de servicios sexuales que constituye el medio
de vida de muchas mujeres cis, trans* y también de hombres que en general, debido a
dificultades socioeconómicas comienzan a ejercer esta actividad. Ofrecer servicios
sexuales a cambio de dinero en nuestro contexto sociopolítico comporta contextos de
vulnerabilidad principalmente para aquellas personas que lo ejercen, puesto que se
realiza en condiciones clandestinas, bajo regulaciones promovidas por intereses
capitalistas, patriarcales y moralistas, así como por medidas de control migratorio, dado
que una alta cantidad de personas son migrantes (Silvia Federici, 2018; Nuria Cordero y
Rafael Cáceres, 2020).
En esta propuesta, queremos considerar la gran variabilidad de formas de oferta de
servicios sexuales, tales como actividades relacionadas con la pornografía, trabajo de
alterne, de gogó, así como de entornos donde se realizan: pisos, clubs, saunas, espacio
público, redes y plataformas, etc., y mostrar las posibilidades de subsistencia que permite
el TS de cara a realizar proyectos personales y familiares que, en otro tipo de trabajos
subalternos, las mujeres no conseguirían. Además, si el TS es autónomo, consentido y
negociado por las propias mujeres, se convierte en una actividad con condiciones
laborales aptas y dignas.
Analizar esta realidad es compleja, especialmente porque el conocimiento que tenemos
de ella está envuelto en el silencio de las voces de las y los protagonistas principales, o
porque la moral social imperante nos hace catalogar desde un principio que el ofrecer
servicios sexuales es inmoral y rechazable, convirtiendo a las personas que ofrecen estos
servicios en víctimas o en personas indeseables, y a los usuarios (principalmente) en
seres abominables (Georgina Orellano, 2022). Así mismo, se suele criminalizar y
estereotipar previamente a todas aquellas personas que median en el trato sexual,
impidiendo así investigar y conocer cómo son los procesos de tránsito de mujeres que
migran para ejercer el TS, o el tráfico o la trata, o las relaciones que se producen en los
lugares de llegada para organizar el trabajo.
Tampoco sabemos cómo son los procesos de negociación de las mujeres en sus lugares
de trabajo, sus historias de vida, sus condiciones económicas y sus necesidades. El
estigma que se incardina en las personas que realizan trabajo sexual, satura su identidad,
las fragiliza en extremo. El ser puta, el ser sexo, es lo que define a las mujeres que hacen
el trabajo sexual (Paula Sánchez-Pereira, 2023), de tal manera que tienen que mantener
muchas cuestiones de su vida invisibilizadas, ocultas como mecanismo de protección,
teniendo efectos sobre su bienestar. Ello conforma identidades y subjetividades
condicionadas a vivir en el “closet”.
Dentro de las políticas sociales, hay un gran vacío para asegurar los derechos y la
dignidad de las personas que hacen TS, entrando en una gran controversia los discursos
abolicionistas y los discursos proderechos (Lynzi Armstrong y Gillian Abel, 2022), no
llegando a ningún punto de encuentro, sino al contrario, viviendo serias tensiones que
no resuelven los problemas de las personas más vulnerabilizadas por las condiciones de
trabajo y las condiciones legales y administrativas, en este caso, de muchas mujeres
trans*y cis y también de hombres no regularizades (Laura Agustín, 2009; Dolores
Juliano, 2004).
Todos estos factores nos llevan a realizar una propuesta en este monográfico,
pretendiendo incorporar algunos ejes a partir de los cuales podamos visibilizar,
reflexionar y trabajar sobre diferentes cuestiones que atañen al trabajo sexual.
Concretamente enumeramos algunos relevantes, de los cuales se puede participar en uno
u otro, todos ellos necesarios:
-estudios de carácter genealógico que recojan diferentes estudios-investigaciones sobre
políticas y contextos de trabajo sexual,
-el trabajo sexual como actividad laboral: espacios de trabajo, condiciones laborales,
negociación con los clientes, las/les y los trabajadores sexuales como profesionales,
características de este tipo de trabajo, establecimiento de organizaciones de defensa y
sindicatos, así como la detección de necesidades que presentan,
-aproximaciones al conocimiento de mediadorxs, empresarixs, protectorxs, traficantxs,
y otras personas actoras en el campo social del trabajo sexual, sobre las cuales no existe
prácticamente un abordaje académico y apenas contamos con el discurso hegemónico de
criminalización versus victimización,
-la salud y el bienestar de las personas que ejercen trabajo sexual, cómo les afecta el
estigma y como se resisten frente a él desde una perspectiva interseccional. Cómo se
produce y manifiesta la subjetivación a partir del estigma (pecadoras, delincuentes,
criminales, víctimas, etc.),
- las metodologías y epistemologías que desde la academia y la intervención nos sirven
para abordar el conocimiento sobre el trabajo sexual y el compromiso de les
investigadores y profesionales de ser aliades de las personas que hacen trabajo sexual.
También para plantearse las sexualidades como relaciones corporeizadas en las que
entran en juego conceptos como el deseo y el poder (simbólico, material),
- las perspectivas feministas, como constructoras de representaciones y discursos
sociales, y también como conductoras de políticas públicas en aras de un objetivo de
justicia y de derechos humanos, de dignidad de las personas y de igualdad en cuanto al
sexo-género en intersección con otros ejes como raza, etnia, edad, orientación e
identidad sexual, religión, clase social, lugares de procedencia, diversidad funcional, etc.
Referencias bibliográficas:
Agustín, L. 2009. Sexo y marginalidad: emigración, mercado de trabajo e industria
del rescate. Madrid: Popular.
Armstrong, Lynzi y Abel, Gillian (2022). Trabajo sexual con derechos. Una alternativa
de despenalización. Barcelona: Virus
Cordero, N. y Cáceres, R. (2020). Mujeres africanas en Situación de Trata. Diversidades,
resistencias y oportunidades. RELIES: Revista Del Laboratorio Iberoamericano Para
El Estudio Sociohistórico De Las Sexualidades, (4), 193–207.
https://doi.org/10.46661/relies.5103
La movilidad humana desde las dimensiones sexo/género: estudios de caso y debates teórico metodológicos
EDITORES:
Enrique Coraza de los Santos. El Colegio de la Frontera Sur (México)
Pilar Uriarte Bálsamo. Universidad de la República (Uruguay)
Invitamos a todes a presentar propuestas orientadas a reunir trabajos que aborden las relaciones entre movilidad humana y las diversas manifestaciones de las identidades y prácticas sexogenéricas, personales y colectivas, atravesadas por moralidades y formas de control de los cuerpos en movimiento
Pensamos el concepto de movilidad en una acepción amplia, referida a diferentes escalas; que involucran transformaciones en los contextos espaciales y sociales a partir de desplazamientos relativamente permanentes, hasta estrategias en los recorridos urbanos y los espacios habitados o evitados.
Buscamos recibir textos que aborden diferentes formas de movilidad y circulación vinculadas a manifestaciones identitarias sexo genéricas y disidencias; hasta propuestas en las qué, las relaciones de género y las proyecciones sociales sobre los cuerpos sexuados en formas de estrategia/agencia o blancos de violencia, determinen o constituyan esas movilidades. Proponemos poner en diálogo estudios de caso con trabajos que problematicen aspectos teórico metodológicos, a partir de diferentes disciplinas y enfoques.
En esta propuesta monográfica nos interesan las experiencias y vivencias de personas y colectivos, en procesos de movilidad y las transformaciones que se desencadenan a partir de estos. En ese sentido podemos encontrar aspectos que hacen a las identidades sexogenéricas y sus posibilidades de expresión en relación con sus contextos familiares, culturales y sociales ¿Qué significa ser mujeres, homosexual, trans en el lugar en que habito? ¿Qué formas de reelaboración de la identidad, personal y colectiva habilita el desplazamiento? Por otro lado, nos encontramos con las formas en que los cuerpos sexuados, son representados en términos de género y sexualidad, en los contextos de emisión, tránsito y permanencia; generando especificidades en los procesos de movilidad. ¿Cómo son vistos e imaginados los cuerpos en movimiento? ¿A qué violencias específicas se exponen esos cuerpos, percibidos como vulnerables y que por tanto pueden ser apropiados? ¿Qué estrategias se despliegan, para proteger, potenciar, dar continuidad o simplemente sobrevivir durante el trayecto migratorio? ¿Qué dispositivos de control, censura, moralización deben atravesarse a la hora de poner en práctica esas estrategias?
Al trabajar desde las movilidades, buscamos problematizar su definición en términos teóricos, así como la forma en que éstas se hacen efectivas y cómo son percibidas, tanto por las personas que las protagonizan como por quienes forman parte de los contextos de emisión, tránsito y recepción. En este punto es donde nos interesa pensar en movilidades que, en una primera instancia pueden estar asociadas a motivaciones laborales o educativas, pueden también ser abordadas desde el marco analítico de las movilidades forzadas, dado que son producto de violencias, discriminación, procesos de exclusiones y censura del contexto socio-familiar de origen. ¿En qué medida, las expresiones identitarias, las prácticas sexuales o la simple pertenencia a una categoría desvalorizada impulsan la movilidad? ¿En qué medida esto se relaciona con otras motivaciones que impulsan la movilidad? ¿Hasta qué punto pueden caracterizarse cómo una opción o una imposición?
Interesa también la relación que las movilidades guardan con el espacio, con los conceptos de lugar y pertenencia, y con la forma en que estos son vividos desde percepciones subjetivas de hostilidad e inseguridad, así como con amenazas concretas a la integridad. Como las posibilidades de expresar las identidades y sexualidades se relaciona con la apropiación del espacio, con su vivencia en términos de lo privado, lo público, lo visible, lo invisible, lo abierto o lo cerrado de los mismos donde las personas se expresan o se inhiben. Esta dimensión espacial puede ser abordada no sólo en su presente sino también en la historicidad de las relaciones sociales y los territorios.
Vinculada al uso de los espacios, buscamos pensar los procesos de fronterización, que implican un control de la movilidad no sólo en términos geográficos, sino sociales, económicos y morales. En qué medida los límites y las fronteras establecidas son obstáculos para el tránsito de las personas en una diversidad de experiencias cotidianas, y cómo las fronteras, principalmente las fronteras morales, operan como mecanismos de restricción y control de los cuerpos y sus movimientos. En otro sentido, la fronterización puede ser también un elemento de definir espacios seguros donde expresarse y poder reconstruir vida cotidiana, ocio, encuentros afectivos o sexuales, o actividades destinadas a la provisión de recursos, afectos o incluso evidenciar, visibilizar y denunciar. Finalmente, cómo la vivencia en el espacio puede derivar en nuevos procesos de movilidad, transitoriedad, asentamiento o detención y/o espera.
Dentro de los tópicos pensados también tienen su cabida las cuestiones asociadas a las personas como sujetos/sujetas de derecho, tanto en las dimensiones normativas (ya sea normadas o como parte de las luchas y reivindicaciones para que se normen) como del ejercicio de los mismos. Aquí pensamos en cuestiones como la relación entre identidad vivida e identidad asignada administrativa y jurídicamente, acceso a la salud, a la educación, a la vivienda, al mercado laboral, mecanismos de protección nacional e internacional, sobre los cuerpos y la reproducción.