En Sevilla hay dos cosas básicas, la Semana Santa y la Feria de Abril. Siempre se ha dicho que la feria tiene que ser después de la Semana Santa para poder debatir de las procesiones que tuvieron lugar dos semanas antes y ocupar los días vacíos en el calendario sevillano hasta que llegue la romería del Rocío y el tiempo de glorias. Sin embargo, siempre hay gente que tiene ganas de más y una Semana Santa no les basta, por lo que se creó la «Procesión de la Pata de Pollo Coronada», siendo esta una de las grandes leyendas de la feria que no mucha gente ha podido ver con sus propios ojos. Tal y como suena, en el año 1995 procesionó por primera vez por las calles de albero del Real de la feria una pata de pollo. Se origina cuando en la «madrugá» del viernes al sábado de feria, en la caseta «Er 77» un grupo de amigos muy cofrades decidieron montar un altar efímero presidido por una pata de pollo que había sobrado en la cocina. Este altar lo hicieron en una tradicional silla de enea y a alguien se le ocurrió sacar la silla de la caseta y montar su propia cofradía, y así lo hicieron a las 6 de la mañana. La salida procesional de esta pata de pollo causó un gran revuelo en las casetas próximas y una gran multitud de feriantes que aún quedaban por allí asistieron al encuentro.
Al año siguiente, esta salida se volvió a repetir, pero con una mayor afluencia de público que había oído lo que iba a suceder y con un altar mucho más profesional, que estaba compuesto por la pata de pollo atada al espaldar, del que colgaban dos botellas de manzanilla y decorada con algunos trozos de farolillos de la calle, y en la parte delantera otras dos botellas de manzanilla rematadas por puros habaneros simulando la candelería de un paso de palio, parte de la silla forrada con papel de plata como si de respiraderos y varales bañados en plata se tratase, dos gambas colgando a modo de maniguetas y como llamador, el pomo de la puerta del cuarto de baño. No solo eso, sino que además contaba con un exorno «floral» compuesto por las flores de las cabezas de las gitanas que quedaban allí y los pañuelos y corbatas de las chaquetas de los hombres.
Paso procesional de La pata de pollo coronada
Una vez salía la silla de la caseta, el público que esperaba fuera enloquecía y era recibida con vítores y gritos de «¡guapa!» o «¡reina!». Por si fuera poco, se recreaba el ritmo de la famosísima marcha de Manuel López Farfán «Pasan los campanilleros» con el choque de los botellines y las copas de manzanilla, y como campanillas, las llaves de casa o del coche. Se le cantaban saetas y sevillanas durante su recorrido, que variaba, pues algunas veces iba hasta la portada de la feria o hasta la caseta municipal. Se tiene constancia en un cuadro dentro de la propia caseta de un poema que le dedicaron a la pata de pollo:
«Porque no es preciso que te alaben,
Bella perla del Real
Pues de principio a final
Pata más borracha no cabe.
Yo que te he visto en la calle
Al esconderse la luna
Patas mejores habrá
Pero como tú. ninguna.»
Tal y como suena, esta tradición se mantuvo durante años, aunque a principios de los 2000 se sustituyó la pata de pollo que se cambiaba cada año por una de plástico y desde entonces, se creó un cuadro para que fuese expuesta permanentemente en la pared de la caseta hasta que llegase el momento de su salida.
Cada año, la procesión adquiría más popularidad y reunía a la mayoría de feriantes que quedaban a esas altas horas de la madrugada, mujeres que creaban sus propias mantillas con los manteles de las mesas y le tiraban «petalás» a su paso por la portada de la feria, y un año, al pasar por la caseta de la Guardia Civil, le colocaron un pin del cuerpo de policía y desde entonces fue «La pata de pollo coronada», una auténtica parodia a la Semana Santa. Con el paso de los años y el crecimiento de esta «hermandad», creció el malestar de otras personas que lo veían como un acto totalmente irrespetuoso y burlesco hacia una de las grandes tradiciones de la ciudad de Sevilla, hasta que en el año 2006 salió por última vez a las calles de la feria, aunque sí se mantiene la procesión por el interior de la caseta.
Esta es sin duda, una de las tradiciones más extrañas que han existido a lo largo de la historia de la Feria de abril, y que para los pocos que conocen de su existencia, contar lo que pasa cada madrugada del viernes al sábado en la caseta de «Er 77» no es una tarea nada fácil sin que suene como una chorrada o una broma de mal gusto, aunque existen otras casetas que han continuado ellos mismos la tradición y creado sus propios altares de culto.
Pero sí, la procesión de la pata de pollo existe, y si por casualidad estás en la feria a esas horas, no te pierdas la oportunidad de presenciar uno de los momentos más grotescos del año en la calle Espartero 63, porque como dicen, si Sevilla no existiera, habría que inventarla.
FUENTES:
Machuca, F. (2022, 7 mayo). La pata de pollo: herederos del marqués de las Cabriolas. Diario ABC. https://www.abc.es/sevilla/ciudad/sevi-pata-pollo-herederos-marques-cabriolas-202205070816_noticia.html
Hablando de feria: la Hermandad de la Pata de Pollo. (2014, 13 octubre). El Gólgota. https://elgolgota.wordpress.com/2014/05/08/hablando-de-feria-la-hermandad-de-la-pata-de-pollo/
Rascaviejas. (2009, 26 abril). ’25 DE ABRIL. LA PATA DE POLLO. https://elalmanaquedesevilla.blogspot.com/2009/04/26-de-abril-la-pata-de-pollo.html
ArteSacro. (s. f.). Pata de pollo coronada. Antonio Sánchez Carrasco. ArteSacro.org. https://www.artesacro.org/Noticia.asp?idreg=95064
La Feria de Abril y la Hermandad de la Pata de Pollo – FERIA DE SEVILLA. (s. f.). https://feriadesevilla.es/la-feria-de-abril-y-la-hermandad-de-la-pata-de-pollo/