“El régimen de custodia compartida avanza porque realmente es el mejor modelo de responsabilidad parental, ya que los niños no tienen que separarse ni de su padre ni de su madre”. Con este argumento, Francisco Serrano, magistrado en excedencia y director del despacho Serrano Abogados, ha apostado por aplicar esta medida siempre que sea posible, aunque sin establecer criterios “excluyentes ni exclusivos”, porque “hay que mirar siempre el interés del menor”. Así, ha propuesto que se tenga como “referente” el modelo de custodia compartida salvo que se acredite que para el niño es mejor un régimen monoparental “por falta de idoneidad o imposibilidad física de uno de los progenitores”, al entender que los menores “necesitan una vinculación, un apego, que no tiene que quedar reducido a cuatro o cinco días al mes, como ocurre muchas veces”.
El magistrado, que acaba de regresar a Sevilla tras solicitar la excedencia en su último destino en Badalona, ha hecho estas declaraciones antes de pronunciar la conferencia titulada ‘El matrimonio, una relación participativa’ dentro del Curso de Verano ‘Efectos del concurso de acreedores: responsabilidad de los administradores y consecuencias civiles’, que se ha impartido hasta hoy en la sede de la Universidad Pablo de Olavide en Carmona bajo la dirección de Cecilia Franco Romero, abogada y socia de Iureko Abogados y Economistas.
Serrano ha señalado que, aunque en Andalucía el porcentaje todavía es bajo, en Badalona se aplica el régimen de custodia compartida “en el 50 por ciento de los casos o incluso más” y ha añadido que el Derecho de Familia catalán “supone un avance envidiable con respecto al resto del territorio español”. En este sentido, ha considerado que “tendríamos que tender hacia un código de Familia como el que tienen en Cataluña porque nos llevan muchísima ventaja: es mucho más positivo y comprensivo con las necesidades de las familias, con los intereses en juego y, por supuesto, con los intereses de los menores”, ha explicado.
Cuestionado sobre el régimen de custodia de los menores en los casos donde exista violencia de género, el letrado ha advertido que a veces se producen “fraudes” para evitar que los jueces dicten la custodia compartida mediante la interposición de denuncias por violencia de género por parte de algunos abogados que así lo aconsejan en situaciones de separaciones traumáticas y ha reclamado una custodia que favorezca a los hijos “independientemente de los intereses y de los beneficios que quieran obtener sus progenitores”. No obstante, ha afirmado que la mayoría de las rupturas suelen ser amistosas pese a que algunos profesionales “tienden a buscar la contenciosidad y se acaba en un juicio”.
Para Francisco Serrano, la clave reside en que “cada vez nos aguantamos menos en este país de relativismo moral y no nos damos cuenta de que el matrimonio tiene que ser una relación participativa que implica la obligación de tener que aguantar al otro y supone que los derechos que yo tengo como persona están limitados porque hay otros derechos en juego que hay que compartir y ser solidarios”. En cualquier caso, “si en un momento dado desaparecen el afecto y el amor, tenemos que ver el divorcio, más que como una tragedia, como una solución ante situaciones de conflicto”. Y siempre es mejor “intentar llegar a un acuerdo amistoso” para evitar llegar a un procedimiento que “suele ser demasiado largo y costoso”, hasta el punto de que “muchas veces termina con la muerte de los interesados”. A juicio de Francisco Serrano, “hay que arbitrar métodos más eficaces y más rápidos porque la justicia lenta deja de ser justicia”, ha concluido.