Los vertebrados, el grupo animal en el que nos encontramos los humanos, siempre han sido un foco de estudio en diversos campos de la Biología. Este grupo ha logrado adaptarse a casi todos los ecosistemas de la Tierra, gracias a su enorme diversidad. En el grupo de investigación de Regulación Génica y Morfogénesis del Centro Andaluz de Biología del Desarrollo (CABD), llevan años preguntándose cómo la regulación de los genes ha cambiado en la transición de invertebrados a vertebrados. En un estudio anterior sobre las claves genómicas del origen de los vertebrados, que fue publicado en 2018 en la revista Nature, vieron que en esta transición los genes de vertebrados ganaban una regulación más compleja y, además, estos genes se duplicaban y ganaban funciones más específicas. Partiendo de esta base, un nuevo estudio publicado ahora en Proceedings of the National Academy of Sciences (PNAS) ha arrojado luz sobre cómo esta regulación se ha hecho más compleja. Para ello, han estudiado la regulación de los genes en vertebrados diferentes, como la rana y pez cebra y los han comparado con los invertebrados anfioxo y el hemicordado Ptychodera flava.