La Residencia Universitaria Flora Tristán acoge un año más a los alumnos y alumnas del programa FEVIDA, durante una semana diecisiete jóvenes con diversidad funcional cognitiva convivirán con estudiantes de esta residencia, proyecto social de la Universidad Pablo de Olavide en el Polígono Sur. El alumnado forma parte del título propio ‘Formación para el empleo y la vida autónoma de personas con discapacidad intelectual (FEVIDA)’, que celebra su séptima edición orientado a formar y preparar laboralmente a sus estudiantes para una vida autónoma.
Este título, gestionado por la Fundación Universidad Pablo de Olavide, arrancó su primera edición en el año 2017 y desde entonces se han formado en él más de cien estudiantes. Es un programa financiado por la Fundación ONCE y la Unión Europea a través del Fondo Social Europeo, y cuenta, además, con la colaboración de entidades como Down Sevilla y Asociación Paz y Bien.
Al acto de bienvenida a esta actividad, celebrado en el Salón de Usos Múltiples de la Residencia han acudido el vicerrector de Cultura y Políticas Sociales, David Cobos; el delegado del Área de Barrios de Atención Preferentes y Derechos Sociales y teniente alcalde del Ayuntamiento de Sevilla, José Luis García; la directora general de Innovación Social de la UPO, Esther Prieto; la directora de este título propio, Rosa María Díaz; el director de la Asociación Paz y Bien, José Luis Gordillo; el representante de Down Sevilla, Rafael Peral, así como profesorado del título y el alumnado de este curso.
Durante el acto, David Cobos ha dado la bienvenida a la Flora Tristán a los estudiantes y ha destacado que esta actividad se enmarca en el compromiso del Vicerrectorado de Cultura y Políticas Sociales en la atención a la diversidad funcional, porque todos somos “iguales ante la diversidad”. Además, también ha señalado que “la universidad es la docencia, la investigación, pero la universidad también es el compromiso social con la sociedad en general, y con lo más cercano en particular. Tiene que ser compromiso con el barrio, con la ciudad y con donde estamos”.
Por su parte, desde el Ayuntamiento de Sevilla, el delegado José Luis García ha dado la enhorabuena a los participantes en la actividad y a los organizadores porque “la experiencia de vivir de forma autónoma es fundamental para dar capacidad y empoderar de cara a salir adelante cada uno por sí mismo. Acceder al mundo de manera independiente es una oportunidad que hay que aprovechar”.
Por último, la dirección del título y las entidades colaboradoras señalaron que es importante aprovechar la responsabilidad de vivir esta experiencia porque es de las pocas asignaturas que solamente se estudian en este título.
Entre las actividades destacadas de esta semana de inmersión, el próximo jueves los alumnos y alumnas serán recibidos por el Comisionado para el Polígono Sur, Jaime Bretón; y el viernes, tendrán un encuentro virtual con estudiantes del mismo programa de otras universidades. Además, y dentro de la convivencia con otros estudiantes de la residencia participarán en una comida colaborativa elabora por ellos mismos; así como en otras actividades deportivas, lúdicas y sociales en el barrio.
Con esta semana de inmersión comunitaria se pretende fomentar la autonomía en la vida de las personas con discapacidad cognitiva, donde además podrán experimentar la convivencia junto con otros residentes universitarios. De este modo, el alumnado se integrará en la vida cotidiana de la propia residencia y formará parte de las distintas acciones enmarcadas dentro de proyectos sociales en el Polígono Sur, que ponen de manifiesto las políticas activas en materia social que desarrolla la universidad en su entorno.
Este título propio, orientado a la preparación laboral del estudiantado, se estructura en materias de habilidades, humanísticas y profesionales que, complementadas con actividades extracurriculares en el campus y actividades compartidas con alumnos de grado y postgrado de la universidad, enriquecen estos estudios para conseguir el objetivo planteado y la integración en la vida social de las personas con diversidad funcional.
Fuente: Fundación Universidad Pablo de Olavide