7 estrategias para la innovación y la creatividad en la empresa
Por Yoriento.
Hoy toca hablar de innovación y creatividad, dos palabros tan usados como confusos. En la empresa hay muchas actitudes y frases que matan la creatividad, que impiden intentar otra cosa. Os sonarán excusas tales como “estamos demasiado ocupados ahora, tal vez en otro momento”, “es un cambio demasiado radical, mejor vamos poco a poco” o “lo que propones es poco realista”.
Tal vez la definición de innovación esté cercana no tanto a hacer lo que no se hacía como a hacer algo nuevo que se tiene que aprender, con reorganizar lo que ya existe. En el blog Trabajo colaborativo en Red leí que Michael Nolan se acercó al concepto afirmando que la innovacion no es más que la inteligencia grupal divirtiéndose. En esa línea, la creatividad también tendría que ver con la inteligencia como un poder para conectar lo que en aparencia no está conectado.
Hace mucho que dejó de ser innovador el uso del término innovación en el mundo del management y la consultoría, pero curiosamente, o no tanto, el principal freno a la innovación y la creatividad en las empresas son los directivos, algo lógico porque la máxima prioridad de todo directivo es seguir siéndolo. Probar implica asumir riesgos considerables con contraprestaciones inciertas. En el blog de @virginiog volví a encontrar esa frase tan tópica como simbólica para representar la relación entre lo innovador y el management engominado:
La creatividad de una reunión es inversamente proporcional al número de corbatas
Como algunos sabéis, en Mayo y Junio participé en el Día de la persona emprendedora de Andalucia, de la mano de Thinking Heads. En las 8 provincias trabajé de una forma práctica la presentación profesional y el networking en el ámbito de los emprendedores iniciando cada intervención con la dinámica de los 5 euros. Por cierto, que es posible que ande por Bilbao el 18 de Octubre trabajando también este tema.
Además del buen rollo con los asistentes, lo más gratificante fue compartir parte de la gira con grandes profesionales. Uno de estos monstruos es Franc Ponti, profesor de EADA, que charló sobre creatividad e innovación en la empresa, y que acaba de publicar otro libro: Si funciona, cámbialo. Este artículo esta basado en esas ponencias.
Innovación en 7 estrategias
1.PENSAR ZEN (THINK ZEN)
Pensar zen tiene que ver con vaciar la mente, dedicar tiempo y espacio a pensar o a no pensar y dar oportunidad a las intuiciones. Pero me gusta especialmente una última reflexión: aprender a sistematizar los momentos zen a nivel personal y organizacional. Un ejemplo de filosofia organizacional que deja espacio al pensamiento se basaría en un modelo 70x20x10: 70% dedicado a trabajar, 20% a reinventar lo que se hace, y un 10% para soñar.
La creatividad está relacionada con la generacion de ideas y las conexiones imaginativas con originalidad y valor, mientras que la innovación está cercana a la capacidad organizativa que permite convertir una buena idea en un producto, servicio o proceso valorado con éxito.
2. PENSAR PO (THINKING PO)
El pensamiento provocativo se basa en desafiar convencionalismos y en construir provocaciones e ideas. Para fomentar el cuestionamiento pueden utilizarse las dos preguntas fantásticas: ¿por qué?, ¿y si?. Se trata de buscar la diferenciación y de instaurar una cultura de tolerancia al error
3.ABRIR LA MENTE (THINK OPEN).
La curiosidad y el aprovechamiento de la inteligencia que nos rodea nos aleja de mirarnos el ombligo y de la introspección. Se trata de aprender de otras realidades, mirar en otros mundos: redes sociales, crowdthinking, crowdsourcing, inteligencia colectiva, trendwatching, coolhunting…
4. PENSAR CON FLUIDEZ (THINK FLOW)
La fluidez se alcanza aprendiendo a pensar en equipo, yendo de la divergencia a la convergencia, evitando los egos, la autocensura y los juicios, y fomentando la cantidad. Se trata de aplicar metodologías que proporcionen fluidez, desarrollen prototipos y permitan la experimentación. Alex Osborn, creador del brainstorming, se removería en su tumba si pudiera comprobar que en la mayoría de los casos que su técnica no se aplica de forma acritica, dejando que las ideas fluyan, sin juzgarlas.
5. EMOCIONARSE (GET EMOTIONAL)
Es importante aprender a expresar y transmitir contenidos emocionales. Las empresas pueden y deben aprender a contar historias que atrapan y que motiven a sus clientes externos pero también a los internos. Si no nos emocionanos no podemos transmitir emociones. No se trata tanto de trabajar como de conectar, hacer vivir experiencias memorables transformadoras: representar, hacer diagramas, mapas mentales, dibujos y usar todos los sentidos para acercanos a otras realidades.
“Si podemos imaginarlo podemos intentarlo.”
6. ALEGRAR LA MENTE
La mejor motivación no es el dinero sino la pasión: se trata de conseguir apasionarse evitando el miedo al fracaso y al juicio social y de construir utopias y perseguirlas. Nos gustan los retos que además también pueden ser importantes para las organizaciones.
7. PENSAR ENTRE TODOS (THINK TEAM)
El conflicto bien gestionado genera creatividad e innovación. Hay que potenciar entornos de diversidad donde las personas piensan diferente pero aceptan a los demás y sus opiniones, escuchan aunque no estén de acuerdo y colaboran.
Fuente: Yoriento.com